

Los personajes zigzagean a través de un ambiente denso y oscuro. Ésto es apoyado por el colorido de las viñetas, en las cuales predominan los blancos, negros y rojos, teniendo pequeños detellos de brillantes tonalidades verdes y azules en los flshback que remiten a la infancia de Bernard.
Yslaire y Balac crearon una galería de personajes grotescos y precarios que evocan la decadencia en que puede sumirse el alma humana. Tenemos, por ejemplo, al artista marcado por la viruela que muere antes de concretar su obra y que habiendo perdido todo rastro de belleza dentro de sí, era capaz de plasmarla en el lienzo como si la estuviese llamando a gritos y que en su lecho de muerte es acompañado por la modelo del mítico cuadro de Delacroix "La libertad guiando al pueblo". También nos presentan al detestable "Vicario", un ser que comercia sexualmente con niñas pequeñas que sostenía en una mano un rosario para orar y en la otra, un bastón para golpear. Por otro lado está Sarah, la hermana mayor de Bernard que, traumatizada por la muerte de su padre, y obsesionada por sus escritos no trepida en perder la vista para recuperar los preciados papeles ni en matar a su propia madre al descubrir su infedilidad. Además tenemos al cínico primo Guizot, un corrupto inspector de policía. Bueno, y no está de más mencionar que los personajes principales son bastante disfuncionales también.
El apartado gráfico es impecable: Viñetas detaññistas y suntuosso decorados unidos a una excelente ambientación hacen de este cómic un verdadero viaje a través del tiempo. El dominio de la figura humana del que hace gala Yslaire es impresionante: Sobrio, elegante y vigoroso, destacándose las voluptuosas formas femeninas y las variadas expresiones faciales logradas con absoluta precisión, dotando a los personajes de gran fuerza dramática.
Tal vez uno de los pocos puntos negros de "Sambre" sea el exceso de desnudos (aunque creo que más de algún Yokoshima les dará un buen uso). No digo que los desnudos sean malos, pero es realmente poco creíble que una mujer se la pase en topless o completamente desnuda casi la mitad del tiempo en una inhópista ciudad en la que ni siquiera están en verano y la verdad es que, aunque la protagonista es hermosa, no es necesario hacerlo tan evidente exponiendo cada centímetro de su anatomía cuando eso no tiene mayor relevancia para la trama ¿o será que era exhibicionista la niña? ¿O una adelantada activista de "Peta"? Otro de los problemas que presenta la obra es la coherencia y continuidad del relato, que a ratos se torna confuso pero tal vez eso tenga que ver con la salida del guinista y el tiempo que demora la realización de cada tomo,de hecho, hasta el momento se han editado cinco (desde fines de los ´80) y aún no se vislumbra el fin de esta saga. Además actualmente otros dibujantes, bajo la dirección de Yslaire, se encuentran tarbajando en un volumen dedicado a Hugo Sambre.
Sin duda, para mí, lo más interesante de Sambre es su crudo acercamiento al lado oscuro del alma humana y al amor visto desde la perspectiva de la tragedia griega ¿Habrá, después de todo, alguna esperanza en medio de tanto odio y decadencia?...mmm... tal vez en veinte años más obtenga la respuesta.
